Divina Pastora, reina y patrona occidental

Caracas, 13.01.2023 (Prensa Mintur).- Desde el pueblo de Santa Rosa, cada 14 de enero inicia el viaje de la Divina Pastora, un encuentro con la fe y la espiritualidad que convoca la esperanza del pueblo. Esta manifestación religiosa considerada una de la más grande de América Latina, este año congrega a millones de devotos y visitantes para venerar a la Patrona larense, pm en su visita 165.

En el trayecto de 7.5 kilómetros se evidencia, el fervor de hombres, mujeres y niños, se reúnen para elevar oraciones, cánticos y alabanzas y caminar junto a la hermosa imagen de la Reina Amada,“María, madre de la iglesia”. Este año la sagrada imagen saldrá bajo el lema “María, signo de reencuentro”. Lucirá un hermoso traje confeccionado en tela de raso blanco y rojo que lleva en la parte frontal de la falda un bordado con los 100 años de la Legión de María, y en el manto, el cuadro de la congregación.

¡La Virgen se quedó en Santa Rosa!
A principios del siglo XVIII llega a la Basílica Menor de Santa Rosa de Lima, ubicado en el pueblo homónimo, la excelsa virgen Divina Pastora. Su historia se remonta en 1736, cuando un vicario de la iglesia de Barquisimeto encargó, a un escultor español, la imagen de la Inmaculada Concepción, y por equivocación llegó la figura de la Divina Pastora. El sacerdote ordena devolverla, pero el peso de la caja no permitió trasladarla.

El misterio de la Virgen, que no se movía, recorrió el pueblo y los feligreses aclamaron que ella quería quedarse. La aceptaron y la Divina Pastora entró a territorio barquisimetano. Su primera procesión fue el 14 de enero, en 1856, cuando los creyentes imploraban su misericordia por la erradicación del brote de cólera en toda Venezuela. Este milagro la consagró, y todos los años sus feligreses rinden tributo.

Hogar de la Divina Pastora
Ubicado en la entrada de Barquisimeto al centro occidente del país, se encuentra el pintoresco pueblo de Santa Rosa. Atractivo turístico, religioso y cultural, lo primero que se encuentra al interior del pueblo es una hermosa plaza, donde llegan distintas aves de la zona. Al lado este se encuentra el templo de Santa Rosa, hogar de la Divina Pastora.

Oscar Viloria, un cronista quien promueve la historia de este lugar espiritual, cuenta que por el año 1671, sus habitantes, los indios Gayones, bautizaron la zona con el nombre “Santa Rosa del Cerrito”. Posteriormente, se adopta el nombre de Santa Rosa, cuando fue canonizada Santa Rosa de Lima, la primera santa latinoamericana, en 1773.

El clima de montaña y la diversidad de fauna que proporciona el río Turbio a esta zona, aún se percibe en sus calles y alrededores. La emblemática entrada, un muro que resalta la silueta de la Divina Pastora, invita a recorrer sus calles y el museo que exhibe más de 200 trajes de la Virgen. Aún en Santa Rosa, se pueden recorrer calles empedradas, visitar casas de bajareques y edificaciones arquitectónicas de la época colonial.

Cada 14 de enero, desde 1856, la población barquisimetana acompaña la procesión de la Divina Pastora para implorar el milagro de erradicar la creciente epidemia de cólera que se había desatado en Venezuela. A esta peregrinación se fue sumando miles de feligreses, y hoy este encuentro con la excelsa advocación de la virgen María, es considerada la tercera concentración mariana más grande del mundo seguida de la virgen de Guadalupe en México y la virgen de Fátima en Portugal.