Caracas 16.06.2022 (Prensa Mintur).- Venezuela es conocida mundialmente por sus manifestaciones artísticas que son el resultado de siglo de integración en el ámbito racial, cultural y religioso de los conquistadores españoles con los esclavos africanos e indígenas desde su llegada al continente.
Dentro de esta variedad de expresiones tenemos a los Diablos Danzantes de Yare, fiesta que se celebra el día de Corpus Christi en los Valles del Tuy , estado Miranda , nueve semanas después del jueves Santo en la que se mezclan las creencias religiosas en la lucha del bien contra las fuerzas del mal representada en la magia y rituales paganos.
La actividad que se festeja desde el siglo XVIII, de acuerdo a los registros históricos, se distingue por la llamativa danza ritual efectuada por los participantes vestidos de rojo con máscaras que asemejan los demonios que portan cruces, escapularios, rosarios y otros amuletos rindiendo tributo al altísimo sacramento. Desplazamiento que se desarrolla acompañado de instrumentos musicales ejecutados con tambores, maracas y cuatro.
Esta vistosa tradición es organizada por sociedades o hermandades integradas por personas de diferentes edades para pagar sus promesas anualmente, evento en el que cada individuo tiene una jerarquía especial de acuerdo al tiempo de participación y la función que desempeña en la organización.
Debemos destacar que hace diez años la Unesco reconoció a los Diablos Danzantes de Yare como Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad en diciembre de 2012, luego de una ardua labor del gobierno nacional por intermedio del Ministerio del Poder Popular para la Cultura y la cancillería , que a lo lardo de una década presentaron todos los requerimientos necesarios para que se le diera la importancia que se merece este evento de la cultura popular .
Se debe resaltar que esta manifestación se ha popularizado en el país , ya que se ejecuta en otras regiones , entre ellas, en el estado Aragua, Vargas, Guárico, Cojedes y Carabobo. Fuera de nuestras fronteras gran cantidad de personas amantes de la esencia de los pueblos intervienen en las fiestas que se realizan en las sedes diplomáticas y centros culturales latinoamericanos.